La velocidad del tráfico

Hace unas semanas varias personas comentaron acerca de la velocidad excesiva de los buses, coches y camiones que pasan por nuestro pueblo. Más recientemente otra persona también lo comentó. Parece que es un problema que preocupa en general y aquí quiero dar un lugar centralizado para sugerencias de cómo superarlo.

Hay básicamente tres maneras de hacer que la gente corra menos. Hacer un programa de concientización, castigar fuertemente a los rápidos, y hacer barreras físicas que impiden que corran mucho. En mi experiencia, los programas de concientización no sirven, porque hay gente egoista que no escucha o no les importa, y son precisamente ellos que son el problema.

Ya que el sistema de puntos para los conductores está en vigor, podríamos intentar que los que exceden la velocidad permitida paquen con sus puntos. Pero esto supone que hay un policía al tanto para cogerlos y darles el parte, y requiere que todos sepan que en Castilleja de Guzmán no hay que correr mucho porque te pillarán. Cerca de mi pueblo natal (en Estados Unidos) hay un pueblo pequeño situado en una carretera tal que la carretera de forma brusca se convierte en la calle principal del pueblo. Tuvieron muchos problemas con conductores que no reducían en nada la velocidad para pasar por el pueblo, hasta que pusieron dos policías tiempo completo para detener a los infractores y llevarlos en el acto ante un juez. La multa que tenían que pagar era considerable. Muy pronto todo el mundo dentro de un radio de cientos de kilómetros sabían que había que poner los frenos al acercarse a ese pueblo. El pueblo benefició no solamente de más seguidad en su calle, sino con el dinero de las multas, que llegaron a formar un apartado importante en los ingresos de la municipalidad. Sin embargo, no creo que la vía de sanciones legales nos funcione aquí, porque no disponemos de agentes para cogerlos.

La otra opción, que medio tenemos y medio funciona, son los sobreelevados. Los coches corren mucho por la calle real y por la calle Cervantes, pero tienen que poner los frenos para los sobreelevados. Tal vez nuestro problema es que tenemos calles en condiciones demasiado buenas. Cuando vivíamos en Costa Rica había una calle cerca de nuestra casa que estaba en una condición lamentable con cientos de agujeros. Arreglaron la calle. Menos de dos semanas después, murió un niño atropellado por una camioneta que pasaba con mucha velocidad. Tuvieron que poner sobreelevados. No sugiero que cavemos agujeros en las calles. Adoquines ayudan a que corran más despacio, pero supongo que cuestan un dineral. ¿Qué tal más sobreelevados?

Tus opiniones, por favor.