Lo que el viento se llevó
Con los vientos de anoche, la recién instalada cubierta sobre el dolmen ha caído. Aparentemente el viento se aprovechó del techo como una vela y hasta llevó unos de los bases de hormigón para hacer que tubos de la estructura cayeran dentro del mismo corredor excavado del dolmen.
Así que el estado postrero de aquel dolmen era peor que al principio
Etiquetas: cubierta del dólmen, Dólmenes
4 Commentarios:
Pues si la cubierta sirve para proteger de los elementos, no cumple su función, es una mera parodia. ¿Cuanto ha costado?. ¿A que no saben a costa de quién se ha pagado?.
¿La habrá instalado egmasa a precio de oro?
Como siempre, nefasta gestión de nuestros tributos.
Y a los responsables ¿les va a costar algo esto?.
Muchas preguntas sin contestación, como siempre...
No puede ser verdad. Ya es tener mala suerte!
Aunque suene exagerado, la cubierta del dolmen de Montelirio se la ha llevado la primera racha fuerte de viento que ha sufrido. Y ya van varios temporales estos meses atrás.
Si vuelven a poner la cubierta, que la calculen como es debido, que para eso se trata de una inversión pública que debe durar más de... una semana.
En una visita a Castilleja de Guzmán para ver el disastre, Bernardo Bueno, el Delegado de Cultura en Sevilla, me dijo personalmente, "El lunes lo pondrán recto" y así minimizó la posibilidad de daños a los trabajos de siglos atrás. El Dolmen de Montelirio es patrimonio universal de la humanidad, para que los vivos, los de hoy, conozcamos nuestras raíces.
Cuando se habla de la Consejería de Cultura, se supone que se trata de alta cultura, la cultura de los que aprecian nuestro patrimonio. No deben mandar allí los filisteos de hoy, la gente de baja cultura que descuiden nuestro patrimonio y lo desprecian.
Al repetir el comentario de Bernardo Bueno a otros compañeros, ellos decían, "Y el martes caerá otra vez." Esto no tiene que suceder si ponen por obra un plan muy práctico que tengo. El cubierto cayó porque los 36 bases de hormigón apenas tienen una planta de unos 50 cm X 50 cm, por lo visto. Con un palo encima de unos 3 metros era fácil para el viento volcarlos. Lo que hay que hacer es tomar los 20 bases que Jale dejó, los que tenían mástiles de unos 6 metros con banderolas, que en varios años el viento nunca volcó. Su base es de 1 m X 1 m aproximadamente. Hay que quitarles los mátiles, poner 10 en fila a cada lado del cubierto, y amararlos con cuerdas a la parte superior del cubierto. Esto extenderá la base efectivo hasta 3 o 4 metros, y el viento tendrá mucha más dificultad en volcar el cubierto otra vez. Además será más respetuoso al patrimonio, porque hace tiempo hubieran recogido los restos de la construcción que no se hizo.
A esa estructura le falta el arriostramiento transversal. No están resueltos los empujes en sentido perpendicular a los laterales. O se ponen cruces en los vanos interiores o se colocan tensores en los laterales.
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