¿La arqueóloga o la vendedora?

Si el estado del dolmen parece un secreto, el futuro de la mitad norte del campo dolménico aun más. Falta una cantidad enorme de tierra que ya no está allí donde proyectan construir las casas de la Urbanización Montelirio.


Han bajado el nivel del suelo varios metros, dejando unos lugares planos con “mesas” más elevados.

En estas fotos, sacadas la semana pasada, se nota que están trabajando con maquinaria pesada. Sin embargo, varios vecinos han comentado que han desaparecido los camiones que estaban quitando la tierra del lugar.

Algunas formas en que han dejado el suelo parecen más como preparación para la construcción de casas que como investigación arqueológica. Por ejemplo esta rampa que baja de la nueva superficie hasta el nivel de la acera,

y esta “escalera” a su lado.

Preguntamos a una mujer sentada dentro del recinto qué significaba todo esto. Ella se identificó como Francisca Elena, arqueóloga, y dijo que todos los movimientos de tierras eran únicamente para la investigación arqueológica. Cuando le preguntamos si no estaban preocupados por si todo su trabajo se perdiera con la construcción de casas, se mostró totalmente despreocupada. Dijo que la obra estaba protegida por la Junta de Andalucía, por Patrimonio, y que nadie tenía poder para destruir lo que estaban haciendo.

Para confirmar esto, fuimos a la caseta de ventas de Jale en la Avenida de Castilleja de la Cuesta. Allí la señora estaba dispuesta a vendernos una casa de cuatro dormitorios en la Urbanización Montelirio por solamente 290.804,60 € (y ¿sesenta céntimos?). Es decir, 3.000 € en arras, 3.000 € al firmar el contrato, y (sospecho) más de 2.000 € por mes por el resto de la vida. ¿Cuándo van a empezar a construir? ¡En cualquier momento ya!

Parece que la arqueóloga y la vendedora no se habían puesto de acuerdo.

Dando la vuelta al dolmen y acercándose por el lado oeste (claro sin meterse en el área cercada), se ve la futura Urbanización de otro punto de vista, metiendo la lente de la cámara por los huecos en la cerca.

De interés especial es este dolmencito, una copia en miniatura del dolmen principal. Con más o menos un metro de diámetro todo está muy reducido, pero fácilmente se reconocen el corredor con pizarras y el lugar de la cámara.

Siguen trabajando con maquinaria muy cerca de los restos interesantes.

Pero algunas de las cosas ya no están. Envueltos en plástico y cada uno con su numerito, estos objetos esperan ser llevados a un lugar no determinado.

¿Cómo apuestas? ¿Cuándo empezarán a construir?