Los usos hoteleros del Potaus ocupan el sector protegido del jardín Forestier

Lo siguiente es un artículo por Auxiliadora Villar publicado hoy en el Correo de Andalucía.

La Delegación Provincial de Cultura ha reconocido su error. El área de oportunidad productiva de tipo hotelero de Castilleja de Guzmán, incluida en el Plan de Ordenación del Territorio de la Aglomeración Urbana de Sevilla (Potaus), invade 36.000 metros cuadrados del entorno de protección de los jardines de Forestier, un Bien de Interés Cultural (BIC).
Los grupos conservacionistas y ecologistas del Aljarafe venían denunciando ante Cultura –queja que elevaron ante el propio Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo– que el Potaus incumplía la Ley de Patrimonio Histórico por la que “un inmueble declarado BIC es inseparable de su entorno”. Este hecho no se había tenido en cuenta a la hora de conceder al municipio un área de oportunidad productiva, la única de uso hotelero, junto al Consorcio de Hostelería. ¿O fue una equivocación?

Tras el intercambio de quejas y escritos entre vecinos y asociaciones del Aljarafe con el Defensor del Pueblo Andaluz y de éste con Cultura –desde finales de noviembre de 2007 a mayo de 2008– el delegado provincial del ramo, Bernardo Bueno, reconoció en un escrito que habían incurrido en un error al superponer la cartografía que delimitaba al BIC y su entorno –publicada en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) en abril de 2004 y dispuesta en orientación oeste-este– y la fotografía aérea que aparece en la ficha del Potaus, dispuesta en orientación norte-sur.

Desde Cultura afirman que, una vez detectado el error “se observa que, en efecto, las dos subáreas en que se divide –el área de oportunidad– una de ellas al norte del BIC y otra al sur, se encuentran totalmente dentro del entorno de protección del monumento declarado BIC, de la antigua hacienda Divina Pastora, el jardín y la Torre de Contrapeso, en Castilleja de Guzmán”.

Respecto a su actuación, en el mismo escrito se hace notar que tanto en las áreas de oportunidad en general como en la de Castilleja de Guzmán en particular se recoge que la ordenación debe resolverse con el planeamiento “con especial atención a su integración en la trama urbana y al impacto paisajístico sobre el escarpe oriental del Aljarafe y el BIC de los jardines de Forestier”.

Igualmente, tanto en ese escrito como en el anterior –fechado el pasado 21 de abril, en el que Cultura afirmaba que el cálculo realizado por Ecologistas en Acción era erróneo– informa de que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU)actualmente en redacción “será informado conforme a la ley 14/2007 de Patrimonio Histórico en todas sus determinaciones”, incluidas las que se refieren a la “contaminación visual o perceptiva de aquella intervención, uso o acción en el BIC o su entorno que degrade sus valores y toda interferencia que impida o distorsione su contemplación”.

Según el escrito, y aunque en el mismo se afirma que se han “rectificado los errores materiales detectados en el informe emitido con anterioridad, conforme al artículo 105.2 de la Ley de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común”, los conservacionistas temen que Cultura se haya limitado a comunicárselo al Defensor del Pueblo Andaluz, en vez de actuar sobre el avance del Potaus, paralizando el proyecto. El Potaus está actualmente en periodo de estudio de alegaciones.